Filipinas, historia de un cerrojazo frente al coronavirus

escrito por Luis Garrido-Julve
El coronavirus en Filipinas

El coronavirus en Filipinas, todo lo que tienes que saber…



Filipinas todavía se anuncia como destino turístico

Muchas de las embajadas filipinas alojadas en los países del Sureste Asiático aún exhiben los gigantescos carteles turísticos del país.

En Bangkok, por ejemplo, empapelan casi una manzana entera con imágenes de playas y paraísos. “Es más divertido en las Filipinas”, reza el triunfador eslogan del país isleño.

 

Oficialmente, aún es uno de los países menos afectados

Sin embargo, los consulados han tirado la toalla y procuran no atender llamadas y dar largas al personal. Porque la ex colonia española es uno de los países menos afectados por el coronavirus a nivel de contagios en Asia, pero quizás la virulencia se refleje en el control casi marcial del Gobierno.

 

¿Es seguro viajar a Filipinas?

Posponer un viaje a las Filipinas es algo muy poco recomendable a día de hoy: la cancelación es quizás la única buena opción.

Porque el archipiélago es un país salvaje que está conducido por la mano dura del sanguinario presidente Rodrigo Duterte, quien puede mentir al mundo durante semanas en relación a la pandemia por coronavirus que se vive en el mundo para luego convertir su nación en un estado de sitio. Porque así es para muchos como está la capital de Manila, sitiada.

No fue así durante las pasadas semanas. La falta de datos realistas en relación al Covid19 en el país insular hicieron que la mortalidad por el virus en Filipinas fuera de un sonrojante 33%. Claro, por mucho tiempo solo se habían identificado tres casos, de los cuales uno de ellos acabó en fallecimiento. Un número bajísimo en un país extremadamente turístico y que gusta mucho al viajero chino.

 

La cifra de contagios se está disparando en Manila

La pasada semana, coincidiendo con el espectacular aumento de casos en Europa, Filipinas empezó a detectar contagios en Manila y la cifra se disparó hasta casi el centenar.

Duterte, a quien no le tiembla la mano para nada, declaró el estado de excepción y puso el cerrojo en Manila de un día para otro. Desde entonces, la capital está clausurada y el resto del país huérfano.

Para los viajeros, esto es casi una pesadilla: cuando hay que salir del país, en Filipinas (casi) todos los caminos pasan por Manila.

 

¿Qué supone el cierre de Manila por coronavirus en Filipinas?

Toque de queda, militares por las calles, alcohol prohibido en algunas urbanizaciones, movilidad nula, puestos fronterizos, comercios cerrados, miedo generalizado… Si a la oportunidad la pintan calva, a la situación en Manila la dibujan pelada. Muy pelada.

Pero, ¿cómo es posible que en la capital filipina esté ocurriendo esto? ¿Incluso cuando hasta ayer en Tailandia su homóloga Bangkok -con el mismo número de casos- funcionaba a todo tren y hoy aún se puede ir uno de copas?

¿En la capital siamesa a uno en el aeropuerto le dejan entrar como a Pedro por su casa y Manila está clausurada?

Esto es básicamente porque Filipinas es un país salvaje y Manila una maraña de barriadas que se extienden más al estilo de una enredadera que como una urbe ordenada. 

Nadie -o casi nadie- respeta nada en Manila, una megalópolis en la que puedes pasar de un distrito en el que parece que estás en una copia de Nueva York a adentrarte en un suburbio con tipos en taparrabos y barracas de uralita.

Pedir responsabilidades a gente que sobrevive con un euro al día es complejo, así que Duterte no se cortó un pelo. Dejó la ciudad encerrada y prohibió los vuelos domésticos, además de cortar las carreteras y bloquear los autobuses. Su idea es encerrar el virus en Manila como si fuera una ciudad apestada, algo que a veces parece: el sueño de muchos políticos es abandonar la capital a su suerte e instalar la burocracia en Clarke, a una hora y media por carretera.

¿Y los viajeros? Pues algunos se han quedado en las islas remotas, disfrutando del buen tiempo y del sol. Otros tienen trabajo. Y en Manila hay aún bastantes extranjeros con demasiado arraigo al país sobreviviendo al coronavirus de aquella manera.

 

Un día cualquiera en la Manila sitiada por Covid19

Hasta al menos el 14 de abril, Manila es una ciudad cerrada. No se puede entrar por aire, mar o carretera. Es más, se está planteando que empiecen a clausurarse los distritos. Taguig está ultimando los detalles, y Makati también lo ha planteado.

No solo eso. Hay un toque de queda desde las 20 horas hasta las 5 de la madrugada. La idea es que la gente pueda ir a trabajar, pero incluso en las horas permitidas no hay gente en la calle. ¿El comercio? Devastado. Solo operan los supermercados y las farmacias, además de muchas tiendas de conveniencia abiertas las 24 horas. Algunos distritos han prohibido el alcohol con la esperanza de evitar rellertas.

“Yo solo bajo un par de veces a echar un pitillo, no salgo a pasear ni nada y en la calle solo veo a guardias de seguridad privada”, cuenta el barcelonés Romà afincado en Manila, Población Makati. De hecho, los pocos restaurantes que no tienen la persiana bajada se dedican a la entrega a domicilio. Por supuesto, los repartidores van a todo gas por una Manila que, inusitadamente, tiene un tráfico más controlado de lo normal.

La gente, además, tiene miedo. No solo por el virus -que ya hizo que se cerraran discotecas y bares antes de que se anunciara el cierre de la ciudad-, sino por la violencia de Duterte, conocido por su guerra contra las drogas. Quizás ahora le haya servido, ya que el consumo se ha frenado en seco. Por la calle no hay gente, y se hacen controles regulares a los pocos coches que se mueven por la ciudad.



La parte positiva de todo ello es que, claro, algo de efecto habrá hecho semejante clausura. El otro gran archipiélago del Sureste, Indonesia, ha sucumbido en cambio a un número de víctimas inusual en la región, de 19 personas a día de hoy. Y eso que el contagio es mucho mayor.

Y la pregunta del millón… ¿cuándo se podrá volver a Filipinas?

Aunque el toque de queda y el cerrojazo finalice el 14 de abril, no hay nada seguro. Será necesario analizar la situación en las próximas semanas, pero sin duda no es un buen momento para viajar al archipiélago, ya que aunque solo esté cerrada la capital, todo el país está afectado por el brote de coronavirus. Por suerte, la mayoría de hoteles devuelven los importes pagados y las aerolíneas están retornando el dinero. 

¿Estás en Manila o cualquier otra parte de este país? Te invito a dejar tu opinión al sobre el coronavirus en Filipinas.

También te puede interesar

1 comentario

xevi devesa 07/04/2020 - 1:48 PM

muy buen articulo
viajamos a filipinas en agosto(si es possible) de momento cebu air (volamos con ellos desde dubai)no nos da opcion de anular el viaje.
cuidate mucho

Contestar

Dejar un Comentario